Desde el placer hemos de habitar el lugar que nos han dicho que es sombrío. Yo creo que de eso trata también la mejora del mundo. Empezar a conectar con la belleza, con la palabra tranquila y constructiva es misión de muchos.
Qué bien darnos espacios para conocernos y compartir el amor que nos habita . La solidaridad es un acto a veces instintivo, te abres porque hay una llamada que no puedes controlar, ni manipular con tu pequeña mente. Lo “sólido” de esta entrega, radica a veces en observar y cumplir de manera útil tu pequeño sitio en el mundo.
El sábado 20 de noviembre un poco después de las 19h (porque los cubanos tenemos ese “problemilla” con el reloj) comenzamos la Tertulia Huracán Amor. Este es nuestro segundo encuentro y elegimos como “útero” la Cafetería La Mila ubicada en La Garriga. Allí su dueña nos abrazó con sinceridad y alegría. Nos recibió como se hace desde antaño a las personas buenas que llegan a casa. Nosotros estuvimos más que encantados, nos sentimos honrados.
La música que Víctor Velasco nos regaló desde su violín era tangible, tenía cuerpo. Sólo había que mirar a las caras de los asistentes. Arsenio Rodríguez fue ingenioso, alegre y revelador contando historias entre Cataluña y Cuba. Gretel Rafuls nos explicó con gracia y nos atrapó esta vez con la proyección del episodio “Angelito”, un cubano que hizo historia en Barcelona. Laura Sarto y Sergio Muñoz brillaron bailando Son de manera elegante y sensual como bien saben. Mónica García nos emocionó con sus palabras sobre la consciencia humana y la necesidad de reconocernos iguales. Conectamos en línea con Agustín Pi , coordinador de la ONG Medicinas a Cuba para estudiar estrategias de envío de las medicinas recaudadas. Y yo estuve encantada de presentarles a todos ellos. Disfruté al compartir alguno de mis versos y al leer el poema colectivo que tejimos a muchas manos. El público que nos acompañó fue la mejor parte, sin dudas.
Para concluir, Mila fue muy certera con sus palabras llenas de naturalidad y sensatez. Señaló que hoy le toca a Cataluña ayudar a otros pueblos, pero que quizás mañana sea Cataluña quien necesite del abrazo solidario. Me encantó que supiera reconocer que todos estamos expuestos a la vulnerabilidad y que precisamente eso nos hace fuertes.
Nos vemos en un fututo poético y cuántico.