Me siento lenta, sinceramente ralentizada. Como contraste están Ellas. Ellas son las Noticias, siempre rápidas, atléticas, siempre en forma.
Las Noticias actualizan cada día una cifra que me entristece. Actualizan una cifra que encierra nombres, nombres que encierran vidas, vidas que marchan de la Tierra.
Hoy quiero dar un aplauso sin balcones, un aplauso íntimo, tranquilo y justo por todos los que se van. Lo quiero hacer como signo de respeto y de gratitud. Ellos también hacen una gran labor. Están enseñando las carencias de nuestro prestigio humano, están poniendo nombre a las faltas emocionales; están mostrando sin pudor todos los errores de los sistemas de vidas que practicamos.
No sé si estas almas antes de partir pudieron recibir el último abrazo, la última sonrisa, la última mirada de quienes les amaron. ¡Espero que sí! Deseo que así haya sido.
marchan...y escuchamos sus pasos marchan...y nosotros invocamos la luz del Gran Sol para ellos marchan...y nos preocupamos nos preguntamos nos preparamos para cambiar nuestras vidas para cambiar la vida en Gaia para cambiar o marchar
Gracias porque todos con el viaje están golpeando nuestros falsos muros hasta que caigan a pedazos. Gracias porque están mostrándonos para siempre las torpezas de la civilización.
Y entonces, me cae en el pecho una gran pregunta. ¿También he de “aplaudir” a los que marcharon por las guerras, por el hambre, por el clima, por los muchos etcéteras que los impulsaron? ¡TAMBIÉN! Doy pues una muestra de profundo respeto a todos los guerreros de la Revolución Emocional y Espiritual.
¡Nos vemos en una futuro poético y cuántico!